Ser honesta contigo misma es el primer paso hacia la libertad. Es mirarte sin filtros, reconocer lo que quieres cambiar, abrazar lo que no puedes y actuar en coherencia con lo que sientes. El autoengaño nos mantiene atrapadas; la honestidad nos libera y nos da la oportunidad de construir una vida más alineada con nuestro verdadero ser.